El estudio de títulos contiene la singularización completa del inmueble a adquirir y sus deslindes, la individualización de los propietarios actuales y anteriores, y el estudio de todos los títulos de propiedad y sus inscripciones, por un período no inferior a 10 años hacia atrás.
Revisaremos todos los títulos traslaticios y declarativos de dominio, los precios, su forma de pago, el cumplimiento de formalidades legales, y la concurrencia de todas las partes y/o de quienes los representen o autoricen válidamente y con sus personerías, descartando cualquier vicio que pueda importar una declaración de nulidad, la resolución o rescisión del contrato de compraventa, o que eventualmente se perjudique la debida inscripción del inmueble a nombre del comprador o la entrega material.
Revisaremos el rol de avalúo fiscal del inmueble y el estado del pago del Impuesto Territorial (Contribuciones) y de los derechos de Aseo Municipal, o su exención, si corresponde.
Revisaremos las prohibiciones, interdicciones, embargos, precautorias, hipotecas, arrendamientos, condiciones resolutorias, expropiaciones, servidumbres y cualquier otro gravamen que pese sobre el inmueble que se adquirirá (últimos 30 años hacia atrás, a lo menos).
Le informaremos sobre el estado de pago de los consumos domiciliarios y servicios, como agua, electricidad, gas u otro con que cuente la propiedad que se adquirirá.